(Escribe Roberto C. Neira). Cuando lean estas líneas, muchos van a decir que vivo de recuerdos, sobre todo los que todavía nos podemos dar el lujo de haber aparecido alguna vez en una foto blanco y negro (por suerte...!, las sepias quedaron muy atrás).
Mi amigo y ex-compañero de El Cronista Comercial (bien dicho porque después en la era Eurnikian achicó su nombre), Franco Recoaro, me dio la sorpresa cuando visité su blog "Todos los recuerdos" y apareció la foto, que él mismo describe en la nota de más abajo.
Se trató, sin duda, de una de las tantísimas oportunidades en que nos encontramos viajando y trabajando al mismo tiempo, recorriendo nuestro país y su vecindad y gozando de ese bien tan preciado para muchos y para los que pueden, que es, naturalmente, la posibilidad de viajar y recorrer nuestro país y el mundo.
Básicamente, nos compenetrábamos de un determinado destino turístico, de su desarrollo natural, de la calidad de los servicios, del transporte, de la atención, en fin, de todos los detalles necesarios para recomendar a un lector interesado en informarse a través de nuestras sugerencias, notas y reportajes y que ofrecían todo aquello que valía la pena descubrir.
Fueron días muy felices que, como siempre sucede, no duran por una eternidad. Era también otro país muy distinto al actual, ni mejor ni peor, sólo diferente. Le paso la posta a Franco para que les cuente cómo eran aquellos tiempos.
'El Cronista Comercial' en Mar del Plata invierno del '86
En Mar del Plata, decir Confitería Orión es decir "La Catedral del Jazz", que funciona desde hace más de 25 años en Luro y la costa. En 1986, el 'Happy Hour' aún no estaba oficializado y acá está El Cronista Comercial a la vanguardia: al piano Roberto C. Neira (redacción) y en guitarra, Franco Luis Recoaro (publicidad), improvisando un bossa con amigos en el clásico reducto de 'la Feliz'...
